Día 4, 04/07/2012 - Logroño / Santo Domingo de la Calzada

Día 4, 04/07/2012 - Logroño / Santo Domingo de la Calzada

Según GPS 59,900 kms.

A quien madruga...  :)

Todos los días nos levantamos pronto. No somos los únicos. Es mucho más cómodo caminar o pedalear cuando el sol aún no está alto, aunque estamos teniendo muchísima suerte porque excepto algún momento puntual, no estamos teniendo calor en exceso.

Compartimos desayuno en el albergue, café de máquina, barritas de cereales, alguna pieza de fruta... por no salir con el estómago completamente vacío. No obstante, haremos nuestra parada de rigor para hacer el segundo desayuno.

Con las alforjas en mano, nos dirigimos al garaje del albergue donde guardamos anoche las bicis. Rápidamente hemos adquirido las nuevas rutinas, colocar alforjas, poner guantes, chaleco reflectante (para vernos y ser vistos bien), casco, bidones de agua...

La salida de Logroño es amena porque discurre a través de un frondoso parque, que lleva hasta el Pantano de La Grajera, en el Parque Natural del mismo nombre.

A lo largo de este recorrido, atravesamos bosque, lagos con patos y puentes. Nos encontramos con un singular peregrino "Marcelino El Peregrino".  En adelante Gandalf para los amigos, sin ánimo de ofender.

Marcelino es una de esas personas que ha dedicado su vida a lo que él siente como bueno y desea. Chapó! no todo el mundo sabe lo que quiere.

Es curioso conversar con él. En el puestecillo que tiene, ofrece fruta fresca, agua, piedras pintadas con la flecha amarilla... sin precio, solo la voluntad. También te permite descubrir álbumes de fotografías antiguas en las que aparece en diferentes puntos del Camino. Lo ha debido hacer tropecientas veces. Algunas son más especiales y en ellas se detiene y relata la historia de esa fotografía.

Cuenta que allá por el año 1972, en su primer Camino, fue consciente de cuan sencillo era perderse y junto con su compañero tuvo la genial idea de pintar flechas amarillas, a lo largo del Camino, indicando la dirección exacta para continuar. Así fue como hizo su segundo Camino, con un bote de pintura amarilla.

Elena se preguntaba a posteriori ¿será verdad? ... puede que si... personalmente le he preguntado a San Google y no he encontrado nada (por el momento) que desdiga lo que Marcelino afirmó. 

Tal relato no me produjo ninguna extrañeza, porque la sensación que me produjo charlar con Marcelino, fue que tiene muuuucha historia y que sabe de lo que habla. Es mi impresión. :)

Nos despedimos de Marcelino (Gandalf), continuamos nuestra jornada del día que si por algo se caracteriza es porque los pueblos son escasos, la distancia entre ellos es mayor.

Hasta Navarrete los paisajes son apacibles y atravesamos numerosas viñas. Poco antes de llegar a este municipio nos encontramos con el antiguo Hospital de Peregrinos. Que no es que esté derruido, si no que debido al lamentable estado en que se encontraba, a finales del siglo pasado lo desmontaron y volvieron a montar en el pueblo de Navarrete, para su mejor conservación.

Todo lo que se desciende... después se asciende por partida doble!

¡Qué bien aparcada! :)

Desde aquí hasta Ventosa,  el Camino es casi paralelo a la carretera. Puede que este pequeño municipio tome su nombre por estar en una zona de viento... porque Maremía!!! Pedalear con el viento en contra tiene su aquel, la sensación de no avanzar es desalentadora, pero contra viento y marea... llegamos a Ventosa. Hora de desayunar!!!

El momento de bajar de la bici es... es... como explicarlo... me sentía como si fuese Robocop! las piernas en bloque... tantos músculos tengo??  pues va a ser que si. :)

Ventosa

La jornada de hoy, tal y como he comentado, se caracteriza porque se visitan pocos pueblos, lo cual en parte es positivo y en parte negativo. Por la misma simple idea, a veces el trayecto se hace corto, a veces el trayecto se hace largo.
El Camino de cuando en cuando muestra sus pequeñas trampas, como los escalones que hay pasados el Alto de San Antón, según se ven una se pregunta ¿y por dónde?... porque los escalones son rocas altas. Pues por donde se pueda, se carga con la bici y se tira hacia delante. Bici p'arriba, bici p'abajo, donde una no puede por sí misma, recibe ayuda de los compañeros y viceversa.

Reponemos agua en las fuentes que encontramos a lo largo del Camino.

Una de las paradas para estirar piernas la hacemos en esta particular construcción. Es un antiguo refugio  para peregrinos. Por si les llegaba la noche y no habían podido alcanzar el siguiente pueblo.

Este está en muy buen estado, supongo que lo habrán reconstruido. El interior está decorado con los mensajes que los peregrinos dejan, lástima que no me he traído pinturas para dejar también un mensaje. Podría ser un lugar cómodo para descansar a la sombra si no fuera por el insufrible olor a orina que hay dentro. No lo puedo entender, se supone que somos civilizados, aunque por lo que observo, unos más que otros.

Atravesamos Nájera que es una histórica villa quel fue antigua capital del Reino de Navarra.
En esta parte, el Camino parece que invita a hacer reflexión. El pedaleo es rítmico, hablamos menos, cada cual está concentrado con sus pensamientos, sus músculos y su ritmo. Es un territorio solitario de campos de cereal y suaves colinas. 

Circulamos por carriles agrarios, rellenos de piedra suelta, en los que de cuando en cuando saludamos a los pocos peregrinos con los que cruzamos, o a los campesinos que nos miran sorprendidos.

Pasado Azofra se encuentra este Crucero, uno de los múltiples que existen.

La jornada de hoy resulta especialmente fatigosa por el desnivel, que no es que sea excesivo, pero es constante, lo cual confiere cierta dificultad.

Debido a la gran distancia que hay entre los pueblos se nos echa encima el momento de comer cuando nos encontramos entre Azofra y Cirueña. En este tramo hay un único árbol que da sombra en el camino. De hecho son 9'4 kms de ascenso. El ritmo de Tana y David es más rápido y les perdemos de vista en el horizonte. Jose y Miguel acomodan su ritmo al nuestro, el de las tres chicas, Elena, Paqui y yo; hacemos una parada en el árbol, comprobamos la distancia que nos separa de Cirueña y continuamos adelante.

Este fatigoso tramo se denomina Loma de la Degollada.

¡Cuidado! A tu izquierda tienes una segadora!! 

Una segadora en la distancia... menos mal! :)

Cuando por fin alcalzamos Cirueña, encontramos un oasis en el camino. Un campo de golf con restaurante. Descansamos a la sombra y nos disponemos a comer. La comida está riquísima y nos atienden de lujo.
Como ya tenemos experiencia en comer y pedalear con la digestión a cuestas, hacemos un ratito de siesta campera, sacamos las colchonetas, hacemos tumbing y z z z ... z z... z z z ...
Es un breve ratito que nos recompone una barbaridad. Además ha pasado mucho tiempo desde mi última siesta campera, me apetecía mucho la idea.

De Cirueña a Santo Domingo de la Calzada, nos faltan casi 6 kms en semi descenso o falso llano. Casi nada.

Reanudamos el pedaleo y llegamos sin dificultad a nuestro destino.

Hoy haremos noche en el Albergue Municipal, 5 €.

Es un albergue grande muy bien ubicado en la ciudad. Compartimos habitación de nuevo con Jose y Elena. Y ¿quién está en este albergue? David y Tana. Ya están ubicados y nos esperan para dar un paseo.

Tras la reconfortante ducha, nos vestimos de persona y ya estamos preparados para pasear. Hemos decidido comprar comida y prepararla en el albergue, ya que dispone de todo tipo de comodidades para ello.

Por las tardes hace frío... aún no llegó el verano en estas latitudes?  :)

Marcas en el suelo indicativas del Camino.

Pero... ¿esto que es?...

La parte menos bonita y más desconocida de El Camino, lo que nadie te cuenta... es que en él habitan tigres escondidos, al acecho entre los matorrales y bosques, preparados para atacar las piernas de los peregrinos, en especial las de Paqui. :)

Pobrecita mía, parece piel de leopardo! Se ha cascado con los pedales en las piernas en varias ocasiones, cada cual le ha ido dejando un moratón nuevo que añadido al anterior le dan este aspecto. Trombocid, masaje y a pasear para activar la circulación. :(

 Compartimos mesa y albergue con un montón de peregrinos. Me llama la atención la variedad de personas, hay familias jóvenes, familias mayores, amigos jubilados, amigos con derecho a roce,  simplemente amigos, personas que peregrinan en soledad y hacen amigos por el camino... niños, jóvenes y mayores. La gran mayoría extranjeros, el 90%?  pues creo que no exagero.

Preparamos la etapa del día siguiente, ya tenemos la ropa lavada y seca, ultimamos los últimos detalles y al saco a descansar!!!

Buenas noches, soñad!! :)